Mirador en el que puedes observar toda la ciudad de Berlin a una vista de 360*. Tiene paneles informativos que van explicando en varios idiomas lo que ves enfrente. Es un mirador que te sirve para hacerte una idea de la ciudad, aunque el precio me parece elevado. Desde la cúpula del parlamento o desde la cúpula de la catedral también hay miradores que aunque no te explican con paneles lo que ves te sirven también para hacer buenas fotos.

En general, bastante bien. Si volviera a Berlín, volvería a subir. Las vistas son espectaculares. Mucha gente, bastante agobio, cola larga para bajar de la torre ya que solo caben 9 personas en el ascensor. Había un bar pero estaban todos los taburetes ocupados y era imposible acercarte a la barra.

Excelente experiencia una vez arriba. El entorno de la torre poco cuidado para un lugar tan emblemático. Fuímos con la idea de ver las vistas simplemente y nos acogió un ambiente maravilloso y fresco que nos invitó a quedarnos dos horas. Muy recomendable.