Después de que lo recojan en su hotel, se dirigirá primero a Bolzano, puerta de entrada a los Dolomitas y capital de la provincia de Tirol del Sur. Atravesar el valle de Eggental que corre hacia el este entre el macizo de Rosengarten y la sierra de Latemar. Esta carretera fue construida en 1894 cuando el territorio formaba parte del Imperio Austro-Húngaro. Deténgase en el lago Carezza, el lago más hermoso de los Dolomitas occidentales, para un descanso de 30 minutos y camine alrededor del lago. Luego, llegue a Karerpass, donde verá el histórico Residence Grand Hotel Carezza, construido en 1893, este fue el primer hotel de lujo en los Dolomitas y ha recibido a invitados muy importantes como la Emperatriz Sissi, Winston Churchill y Agatha Christie. Desde el Karerpass llegará al valle de Fassa en Trentino y pasará por las localidades de Vigo di Fassa y Canazei para llegar bajo los imponentes picos del grupo Sella. Desde aquí, comience una larga serie de 27 curvas cerradas que lo llevarán al famoso Paso Pordoi a una altitud de 2239 m sobre el nivel del mar. Disfrute de un descanso de una hora o tome el teleférico a Sass Pordoi a una altitud de 2950 m. Desde el paso de Pordoi, baje hasta el pueblo de Arabba y continúe hacia el este hasta el paso de Falzarego, la puerta de entrada a los Dolomitas orientales. Llegará a Cortina d'Ampezzo, el principal centro turístico de montaña de Italia conocido como la Perla de los Dolomitas, donde se celebraron los Juegos Olímpicos de Invierno en 1956. Cortina, junto con Milán, volverá a albergar los Juegos Olímpicos de Invierno en 2026. Desde Cortina, la siguiente parada será el lago Misurina con su increíble vista panorámica de los Tres Picos de Lavaredo. El lago, con su vista de los picos al norte y Sorapis al sur, es la imagen más famosa de los Dolomitas en el mundo. A solo 20 minutos del lago Misurina, tendrá la oportunidad de hacer una breve parada en otro lago importante en los Dolomitas orientales, el lago Dobbiaco. Desde Dobbiaco, llegará al extremo noreste de Italia a solo unos kilómetros de la frontera con Austria para el gran final del día: una visita al famoso lago Braies. Desde aquí, volverá a Bolzano por los valles de Pusteria e Isarco.