Sin duda la mejor opción. Nos recogieron en la puerta del apartamento un coche para nosotros solos, nos acompañaron a la entrada de las minas de sal, nos sacaron los Tickets. Cuando terminamos la visita, estaba esperándonos en la puerta de entrada. Facilitan todas las dudas a través de wasap y correos electrónicos. Más barato que otras compañías.

Quizá lo más lioso de la experiencia es el punto de encuentro. Primero tienes que ir al punto de encuentro de la empresa (Discover Cracow), que está en un parking cercano a las minas. Allí te dan una pegatina con la hora y el idioma de tu tour, que debes colocarte a la vista, y te explican exactamente y con imágenes dónde están las minas y dónde esperar a tu guía (todo en inglés). Únicamente hay que tomar una subidita y ya estás en las minas. Una vez allí esperas hasta que tu guía empieza a decir “grupo en español” y reúne a todo el grupo. Reparten las entradas y unos auriculares para escuchar bien la guía. Nuestra guía fue Margarita, era polaca pero hablaba muy bien español. Fue muy agradable y educada. Los datos que nos dio fueron muy interesantes. Dentro de la mina no hace frío, se está muy bien. Lo que preparaos para bajar escaleras.

Me encanto la visita, y la guia la verdad que dentro de las complicaciones que tiene ir por una mina, me gusto bastante explicándonos todo muy bien. La unica pega es el gran descontrol que se organizó al inicio de la actividad. Por cierto, la direccion que se pone como punto de encuentro no es correctobal 100% encontrando el punto por intuición.