Koh Kood o Koh Rang: Excursión de snorkel con almuerzo y traslado
Aventuras de Temporada Alta (de octubre a abril): Lado Occidental de Koh Kood: Imagínate deslizándote por aguas cristalinas, rodeado de exuberantes formaciones coralinas. Los lunes, miércoles, viernes y domingos son tus días para esta aventura. Parque Marino de Koh Rang: Los martes, jueves y sábados explorarás el impresionante Parque Marino de Koh Rang. Imagina arrecifes vibrantes, bancos de peces y quizá incluso una o dos tortugas curiosas. Exploración de la Temporada Verde (de mayo a septiembre): Lado Este de Koh Kood: Durante estos meses, el lado oriental de Koh Kood te atrae. Está protegida de los vientos y las olas, lo que significa una mejor visibilidad. Además, la falta de acceso por carretera garantiza playas desiertas en las cercanías, perfectas para una escapada tranquila. El itinerario: 9 a.m. Salida: Tu aventura comienza cuando zarpa el barco. ¡La expectación es palpable! Primer punto: Bucea con tubo durante una hora. Imagina encontrarte con mantarrayas deslizándose graciosamente sobre el fondo arenoso del mar o avistar una curiosa morena asomándose desde su escondite coralino. Almuerzo y relajación: En el segundo punto, disfruta de un almuerzo tranquilo. Repón fuerzas para seguir explorando bajo el agua. Y sí, ¡también hay tiempo para bucear! Tercer punto: ¡Vuelve al agua durante una hora! Esta vez, quizás nades junto a peces payaso que entran y salen de sus casas anémona o te maravilles con los intrincados patrones de los nudibranquios. Regresa: Alrededor de las 14:30 h en la excursión a Koh Kood y de las 16:30 h en la de Koh Rang, emprenderás el regreso, con el pelo salado y el corazón lleno de magia oceánica. Lo que te espera bajo la superficie: Jardines de Coral: Estos oasis submarinos rebosan de color, como la paleta de un artista sumergida en el mar. Mantarrayas: Elegantes y misteriosas, se deslizan silenciosamente, dejando ondas a su paso. Morenas: Sus cuerpos sinuosos y sus mandíbulas abiertas las hacen fascinantes y ligeramente intimidantes. Meros: Estos peces corpulentos se funden con el arrecife, maestros del camuflaje. Pez león: Cuidado con su aspecto llamativo; esas espinas venenosas van en serio. Nudibranquios: diminutas y extravagantes babosas marinas, cada una de ellas una obra de arte viviente. Pez payaso: Los primos de Nemo en la vida real, anidados en sus hogares de anémonas. Pez globo: Adorables cuando no están hinchados, pero cuidado: ¡tienen un mecanismo de defensa! Tortugas: Antiguas marineras que se deslizan sin esfuerzo por el azul. Barracudas: Elegantes y plateadas, patrullan las profundidades.