Cuando el ajetreo de la vida en la ciudad se vuelve demasiado, es hora de ponerse las botas de montaña y salir a respirar aire fresco. Europa cuenta con una impresionante variedad de parques nacionales para satisfacer este deseo (que los alemanes llaman Wanderlust). Para los más aventureros, están las montañas de los Dolomitas y las cascadas de Croacia. Quienes busquen tranquilidad, la encontrarán en las dunas de Holanda. Aquí tienes algunos de los mejores paraísos europeos para perderse en la naturaleza.
Suiza Sajona, Alemania
Karsts de arenisca y pinares que se extienden hasta donde alcanza la vista. Sí, es justo decir que esta es la versión alemana del parque de Yosemite en California. La Sächsische Schweiz (o Suiza Sajona) se llama así por sus formaciones rocosas y paisaje montañoso. Un paseo por sus escarpados desfiladeros deja claro por qué es un paraíso para alpinistas. Pero no es un destino solo para deportistas. También puedes navegar tranquilamente por el río Elba, para disfrutar de estos impresionantes paisajes.
Distrito de los Lagos, Reino Unido
Numerosos escritores británicos famosos como William Wordsworth o Beatrix Potter han considerado el Distrito de los Lagos su hogar. Y es fácil entender por qué al contemplar la propia poesía del paisaje. Sus 16 lagos y 150 picos lo convierten en un lugar impresionante. Tanto si practicas surf de remo en el lago Buttermere o senderismo en Scafell Pike, el pico más alto de Inglaterra, este lugar tiene aire fresco a raudales. Quizá no sea de extrañar, puesto que es el parque nacional más grande de Inglaterra.
Las Calanques, Francia
Todo amante de la naturaleza tiene una parada obligada en Las Calanques. Este paraíso natural es el hogar de delfines, tortugas bobas y rorcuales comunes. Las calas de esta zona costera del sur de Francia se exploran mejor en barco. Pero si los paseos por cubierta no son lo tuyo, siempre puedes recorrer sus acantilados a pie. Sus paisajes son magníficos: con el centelleante Mediterráneo a lo lejos y flores silvestres a tu alrededor.
Picos de Europa, España
Asegúrate de llevar una brújula en los Picos de Europa, ya que es fácil perderse en este parque que abarca la friolera de 650 kilómetros de la Cordillera Cantábrica. Además, teniendo en cuenta que en él habitan especies protegidas como el lobo ibérico y el oso pardo cantábrico, es mejor no merodear a lo loco y ceñirse a los senderos. Aun así, contemplar estos elevados picos en el horizonte te harán sentir una enorme satisfacción.
Parque nacional de las Dolomitas, Italia
“Impresionante”, “asombroso”, “espectacular”… esos son algunos de los adjetivos con los que los visitantes describen este parque. No cabe duda de que la UNESCO coincide con estas opiniones, ya que ha nombrado al parque de las Dolomitas de Belluno Patrimonio de la Humanidad. Entre sus picos nevados y desfiladeros transcurren ríos cristalinos y pantanos. No olvides la cámara, porque también encontrarás pueblos idílicos y (con algo de suerte) incluso algún que otro águila real.
Texel, Países Bajos
Si solo pides tener una playa en la que relajarte todo el día durante las vacaciones, la isla de Texel es lo que estás buscando para tu escapada, ya que más de una cuarta parte de este bello paraje holandés está formada por dunas. Hay mucho por descubrir más allá de su sereno mar de Frisia: valles boscosos y marismas que invitan a una gran diversidad de aves y que albergan todo tipo de flora y fauna. ¿Que cuál es la mejor manera de verlo todo? Con una típica bicicleta holandesa, por supuesto.
Parque Nacional del Monte Olimpo, Grecia
¿Por qué conformarse con los placeres mundanos cuando puedes seguir los pasos de los dioses? El Monte Olimpo está ligado a nada menos que 12 antiguas deidades. Durante tu visita, atravesarás profundos desfiladeros y densos bosques, y tendrás la ocasión de avistar 50 picos impresionantes. Este exuberante parque alberga más de una cuarta parte de toda la flora griega, así que no te aburrirás en tu camino hasta la cima. Además, acuérdate de presentar tus respetos a Zeus en las antiguas ruinas de Díon.
Parque Nacional de los Lagos de Plitvice, Croacia
Es ideal si quieres tener la oportunidad de quitarte las botas y refrescarte junto al agua después de una larga caminata. Los lagos de Plitvice ofrecen infinidad de lugares idílicos para hacer un descanso y admirar el paisaje. Este parque cuenta con 16 lagos y 92 impresionantes cascadas que desembocan en el río Korana. Hay pocos lugares más pintorescos donde organizar un pícnic. Atravesar sus aguas turquesas por las pasarelas de madera es una experiencia casi hipnótica. Además, quienes quieran ir un paso más allá, pueden adentrarse en sus misteriosas cuevas.
