El recorrido comienza en la Puerta de Wurzburgo, de color amarillo pastel. En contraste con su bonito aspecto vintage, la puerta medieval, que formaba parte de las murallas exteriores del siglo XIII, solía servir como plataforma de observación y cañón blindado para defender el vulnerable lado oriental de la ciudad.
A continuación, pasa por la Iglesia de San Juan, situada en lo alto de una escalinata que desciende hacia el centro de la Ciudad Vieja. La iglesia gótica del siglo XIX cuenta con coloridas ventanas intrincadamente adornadas con escenas bíblicas y un mirador perfecto desde el que podrás captar la emblemática Puerta del Puente Mayor en toda su magnitud, sin el ajetreo del tráfico pesado.
Continúa por un sereno pasaje a lo largo del anillo interior de las Murallas de la Ciudad Vieja y encuentra un cementerio judío medieval enclavado junto a las murallas, que se suma a la tranquilidad y el encanto del viejo mundo de la ciudad.
Después, entra en la Calle Mayor, flanqueada por edificios de entramado de madera con aspecto de cuento de hadas, entre los que destaca la Gasthaus zum Riesen, del siglo XV, la posada más antigua de Alemania. Cuenta la leyenda que el hermoso hotel fue escala de muchos huéspedes ilustres, como los emperadores del Sacro Imperio Romano Germánico, el rey Luis de Baviera, la emperatriz María Teresa, Napoleón Bonaparte y el cantante Elvis Presley.
Haz una parada en el elegante Ayuntamiento Viejo para examinar las marcas de su fachada que indican el nivel del agua de las inundaciones históricas, ¡algunas de las cuales llegan hasta lo alto de su arco!
Al final de la Carretera Principal se encuentra la Plaza del Antiguo Mercado. Esta encantadora plaza se encuentra a la entrada del Barrio Negro, la parte más antigua de Miltenberg, donde el tiempo parece haberse congelado con edificios inmaculados de finales de la Edad Media. Los bulliciosos cafés y puestos que venden comida tradicional o artesanía local ofrecen la oportunidad de observar a los lugareños en su vida cotidiana y sumergirse en la vibrante cultura. Echa un vistazo a la romántica fuente central renacentista, el fondo más querido para las fotos de recuerdo.
En el lado norte de la plaza, la Iglesia de Santiago, del siglo XIII, existe desde los primeros tiempos de Miltenberg. Puede que llegues a oír el toque especial de la campana que coordina con el de la Iglesia de San Juan ¡desde el otro lado de la Carretera Principal!