Me senté en la cubierta superior y lo disfruté totalmente. Nuestro guía, David, estaba muy bien informado e hizo un buen trabajo respondiendo preguntas. También fue genial para evitar que la gente de Stan se encontrara frente a las ventanas bloqueando la vista. Mis hijos y nietos fueron a la cubierta inferior y se pararon un poco en la barandilla, pero me divertí más simplemente disfrutando del viaje. Mi esposo y yo hicimos el recorrido con mi hija, su esposo y sus tres hijos, de 15, 14 y 3 años. Todos la pasamos bien. Realmente debería decir más sobre David: tenía algunas historias graciosas pero no era demasiado cursi. Aprendí mucho sobre el área y la Estatua de la Libertad. Me gustó que le dio crédito a uno de sus maestros por haberle enseñado el poema sobre la estatua e hizo un gran trabajo al recitarlo. ¡Iría de nuevo!

Buena opción familiar para una vista única de la ciudad de Nueva York. Me encanta que el barco pase tan cerca de la Estatua de la Libertad. Mi esposo y una de mis hijas sintieron que un viaje en bote de una hora hubiera sido suficiente. No estoy seguro de si han pensado en ofrecer un recorrido abreviado. Solo un pensamiento. Gracias-La familia Fogarty

Experiencia muy recomendable. Consejos: fuera hace bastante frío así que casi todo el mundo se quiere sentar en la cubierta. Tendrás que ir mínimo una hora antes si quieres encontrar sitio ahí. Si haces este paseo en barco, te diría de no ir a la isla de la Estatua de la Libertad porque de esta manera se ve muy cerca (más cerca que con el ferry de Staten Island). A nosotros nos llovió al principio y fue un poco desastre la organización porque pretendían meter a todo el mundo en el barco, para mí tendrían que vender menos plazas y así más espacio para todos.