Nos gustó bastante y debemos decir que da igual que os guste el futbol o no, esta es una parada recomendada y que creemos obligatoria para todo viajero. Un tour que fue "autoguiado" mediante limitaciones por todo el recorrido, pero que se disfruta sin problema alguno. Es más, esto en parte ayuda a que se pueda ir de forma más pausada, entre otras cosas para poder contemplar todo con lujo de detalles.

Me pareció muy interesante conocer las dependencias del estadio ... solo la audioguía en portugués que no pude seguir durante la gira, encontré el dispositivo muy confuso e hicimos todo por sí mismo, genial, pero ciertamente el día del partido la atmósfera debe ser muy más animado pero vale la pena

Recepción en español, prácticamente todo el personal es muy amable, ya sea por los pasillos que no lo fueron. Lo más amable fue el vestuario, super atento. El estadio es muy bueno, lo que se deseaba era la cafetería dentro, una persona que solo servía y sin opción de comida, el asistente nos dijo que la dona que estaba a la venta era vieja.