Descubre el encanto de Siena en un tour por los lugares más emblemáticos de la ciudad. Explora la Piazza del Campo, el Duomo di Siena, la Torre del Mangia y la Basílica Cateriniana di San Domenico.
Comienza tu recorrido por Siena en la Piazza del Campo, el corazón de la ciudad y una de las plazas más famosas del mundo. Con forma de concha, esta gran plaza inclinada está rodeada de edificios medievales y es el escenario del famoso Palio di Siena, la carrera de caballos que se celebra cada año desde el siglo XVI.
Situate en el centro de la plaza y déjate envolver por la historia, con el Palazzo Pubblico (Ayuntamiento) a un lado y la Torre del Mangia elevándose sobre ti al otro. La plaza también alberga varios cafés y restaurantes, donde podrás disfrutar de un café mientras contemplas el impresionante entorno. A continuación, dirígete al Duomo di Siena, o Catedral de Siena, una de las iglesias góticas más impresionantes de Italia. Situada en la Piazza del Duomo, la catedral es una obra maestra de la arquitectura, con su llamativa fachada de mármol rayado en blanco y negro y sus impresionantes esculturas. Al entrar en el Duomo, te recibirán una gran cantidad de tesoros artísticos, como los frescos de Pinturicchio y las esculturas de Donatello. El interior de la catedral es igualmente impresionante, con intrincados mosaicos y vidrieras que cuentan las historias de la Biblia.
No te pierdas la Biblioteca Piccolomini, dentro de la catedral, un espacio pequeño pero magnífico adornado con frescos del pintor renacentista Pinturicchio, discípulo de Rafael. El Duomo di Siena no es solo un lugar de culto, sino también una galería de arte, una maravilla arquitectónica y un importante símbolo de las profundas raíces religiosas y culturales de la ciudad.
Al salir del Duomo, pasa por la Torre del Mangia, uno de los monumentos más emblemáticos de Siena. Con 102 metros de altura, la torre fue construida entre 1338 y 1348 y ofrece unas vistas impresionantes de Siena y de la campiña toscana que la rodea. La última parada de tu recorrido es la Basílica Cateriniana di San Domenico, situada en la Piazza San Domenico. Esta hermosa iglesia está dedicada a Santa Catalina de Siena, una de las santas más veneradas de Italia, conocida por su profunda espiritualidad y su papel en la vida religiosa y política de la Europa del siglo XIV. La basílica, aunque de aspecto algo austero, tiene un profundo significado histórico y espiritual. En su interior se encuentran las reliquias de Santa Catalina, incluida su cabeza, que se exhibe en una vitrina de cristal. El ambiente de la basílica es sereno y reflexivo, y ofrece un respiro tranquilo de las zonas más concurridas de la ciudad. La iglesia también alberga algunas obras de arte notables, como los frescos del famoso pintor sienés Giovanni di Paolo. Los visitantes suelen acudir aquí para conocer mejor la vida de Santa Catalina, su influencia en Siena y su papel en el contexto más amplio del catolicismo durante la Edad Media.