
Londres: Regent's Canal Waterbus Little Venice y Camden Lock
- Duración: 45 minutos
Desde
14,96 US$
por persona
Con más de 700 especies de vida salvaje, el Zoo de Londres lleva siendo una de las atracciones más importantes de la ciudad desde 1847. A continuación te contamos por dónde empezar para que no te pierdas a ninguno de sus habitantes más famosos.
Visita la piscina de pingüinos más grande de Inglaterra, creada con el ecosistema de la Tierra de Fuego en mente. ¡Los más graciosos son los pingüinos con cresta!
Las criaturas de la selva tienen que vivir en un clima cálido y húmedo, por eso el Zoo de Londres ha construido un invernadero especial para ellos. ¡No te pierdas los adorables monitos y los osos perezosos!
Aquí tendrás la oportunidad de ver animales nocturnos en acción. Entre estos escurridizos animalillos se encuentran los armadillos y los loris perezosos.
Las tortugas gigantes son solo un ejemplo de los increíbles reptiles y anfibios que puedes ver en esta sección del zoológico.
Si no te dan miedo las arañas, no te pierdas el encuentro diario con estas peludas y divertidas tarántulas.
El Zoo de Londres cuenta con muchas exhibiciones temporales que varían en función de la época del año, así que lo mejor es que visites su página web para descubrir qué más cosas hay que ver durante el periodo de tu visita.
Pasarás mucho tiempo al aire libre, así que si hace sol (o incluso aunque esté nublado), asegúrate de llevar la protección solar adecuada y beber mucha agua.
Si prefieres tener una visita tranquila, lo mejor es que vayas un día laborable a mediodía. Te perderás la hora punta matutina y muchos de los posibles visitantes estarán en el colegio.
Por último, recuerda que el zoo es el hogar de estos animales. Aunque pienses que están acostumbrados a los visitantes, no te metas con ellos ni hagas nada que pueda molestarlos. Si tienes niños, asegúrate de que se comporten debidamente.
Nos vino genial para tener pases en las atracciones, no hicimos colas y ahorramos dinero